martes, 18 de marzo de 2014

Crostata de mermelada


La crostata es un postre típico italiano que consiste en una masa similar a la masa quebrada o masa brisa rellena de mermelada de frutas. Tradicionalmente se utilizan mermelada de cereza, de fresa, de melocotón o de albaricoque, pero existen otras variedades con fruta fresca y crema pastelera, o crema de ricotta y cacao. En definitiva, existen múltiples variaciones de la receta original, todas deliciosas para acompañar un desayuno o merienda. A mi particularmente me encanta la de mermelada para desayunar, pero hasta ahora no había encontrado una buena receta para la elaboración de la pasta frolla (la base). La fórmula ganadora se la debo a Stefano, quien me aconsejó añadir una pizca de levadura en la elaboración de la masa, un detalle que no mencionan la mayoría de recetas y que aporta a la masa la consistencia perfecta. El resultado será doblemente delicioso si tenéis la posibilidad de utilizar mermelada fresca casera.

DificultadMedia

Necesitáis: 
300 g de harina
125 g de mantequilla
100 g de azúcar glas
1 huevo entero
1 yema
Ralladura de limón
Aroma de vainilla (mejor si es natural)
Una pizca de levadura Royal
1 bote de mermelada de tu sabor preferido*

Cómo se hace:
1. En un bol, mezclar la levadura con la harina, añadir la mantequilla cortada en trozos y mezclarla con la harina hasta que quede una consistencia grumosa, no tiene por qué quedar perfectamente mezclado.
2. Añadir el azúcar, el huevo (1 entero más una yema) y la ralladura de limón. Mezclar hasta obtener una pasta blanda y lisa. 
3. Formar una bola con la pasta, envolverla con film transparente y dejarla reposar en la nevera durante, al menos, 30 minutos. 
4. Reservar un tercio de la masa para hacer la decoración. Extender con un rodillo el resto de la masa (hasta conseguir un espesor de unos 3-4 mm) y colocarla en un molde redondo dejando unos 3 cm de borde.
5. Distribuir la mermelada sobre la pasta de manera homogénea.
6. Extender la masa que habíamos reservado con ayuda del rodillo y cortarla en tiras de 1 cm de ancho aproximadamente. Colocar cuidadosamente las tiras sobre la mermelada realizando dibujando una rejilla como se ve en la foto.
7. Hornear a 180°C durante 30 minutos.

*Los amantes del chocolate podéis sustituir la mermelada con nutella.

martes, 11 de marzo de 2014

Lasaña de salmón


La receta que os traemos hoy proviene de la revista La cucina italiana, concretamente, de la edición especial de la pasada Navidad. Nos parece una receta buenísima para resolver una cena en poco tiempo y resulta deliciosa. Los ingredientes como el salmón y la pimineta rosa le dan ese toque gourmet con el que podemos sorprender a nuestros comensales. Como sugerencia, nosotros lo acompañamos con un vino fresco rosé. En este caso utilizamos robiola un queso fresco italialo que se combina a la perfección con el salmón. La receta original utilizaba solo salmón ahumado pero nosotros preferimos mezclarlo con salmón fresco para que resulte un sabor y textura más equilibradas.

Dificultad: Media

Necesitáis (para 8 personas) :
400 g de  pasta fresca para lasaña*
250 g de salmón ahumado
250 g de salmón fresco
500 g de robiola (es un queso fresco muy graso de pasta cruda, de color blanco y carece de corteza. Se elabora con leche de vaca 85% y de cabra y oveja 15%).
1/2 dl de leche 
50 g de parmesano 
50 g de pan rayado
50 g de mantequilla
25 g de mejorana
Sal
Pimienta rosa

*Si usas la pasta fresca hiérvela unos minutos antes de formar la lasaña. Si usas la pasta para lasaña ya lista te recomiendo que compres las de la sección de frigorífico, yo uso siempre las más finas (sfogliavelo), no es necesario hervirlas antes de hornearlas y dan un resultado estupendo.

Cómo se hace:
1. Lavar, deshojar y  triturar la mejorana. 
2. Ablandar  la robiola con la leche y  unir la mejorana.
3. Mezclar el salmón ahumado y el fresco (previamente privado de espinas y piel) y picar finamente. 
4. Engrasar un molde de horno. 
5. Colocar una capa de lasaña y cubrir con el  salmón y la crema de robiola. 
6. Continuar alternando capas hasta agotar los ingredientes. 
Acabar con una capa de lasaña.
7. Distribuir sobre la  superficie el parmesano, el pan rallado y la pimienta rosa. 
8. Hornear  a 200°C durante 25 minutos.

¡A disfrutar!